Pongamos en contexto a quienes leen de otras fronteras para poder transmitirles lo que sientes cuando vas a una piñata en otro país.
Cómo son las piñatas venezolanas?
Bueno, lo primero es que la piñata es una fiesta infantil que normalmente se hace en Venezuela a los niñitos por su cumpleaños y que, a pesar de que ellos no entienden nada, las mamás nos esmeramos por realizarlas desde que estos cumplen su primer año de vida, porque aunque digamos "No le voy a hacer nada porque es apenas un año y no lo disfruta", ya al invitar a los primitos y al vecino, terminan siendo al menos diez niños y se pica una torta, se rompe la piñata y se hacen cotillones. Esto se repite año tras año digamos que hasta los 7, bajo el mismo formato.
Es así como una pequeña, mediana o gran piñata siempre es un evento lleno de detalles cuidadosamente planificados. Empezando por decidir cuál será el motivo de la fiesta, que le guste al cumpleañero(a) y que sea bonito! Luego la lista de invitados, la decoración, la selección de la comida, la planificación de los juegos, distracciones y respectivos premios, la música, la piñata y finalmente los cotillones o regalitos de despedida que no deben olvidarse pues a los niñitos les parecerá malísima una fiesta si no reciben el suyo! No importa que hayan disfrutado un montón... (No les pasa que sus hijos cuando les dices: "Nos vamos!" van todos respetuosos a despedirse primero de la mamá del cumpleañero y les dicen:"Me voy" y se quedan mirando fijo casi que con las manos estiraditas esperando, por supuesto, su bolsita...!!!)
Pues bueno, todo esto les suena como a la preparación de un matrimonio? Sí, básicamente cada fiesta de cumpleaños es una celebración que amerita bastante dedicación y creatividad para que no falte nada. A la mayoría de las mamás venezolanas nos encantan estos preparativos y nos preocupamos por cada detalle para que nuestros hijos lo disfruten mucho y sea memorable para él y para los invitados también!
Qué hace a la piñata venezolana ser tan característica?
- Primero que nada éste es un evento de al menos 5 horas de duración. A las piñatas venezolanas se les coloca la hora de llegada, no la de salida. Son el plan del sábado o domingo porque tienden a extenderse hasta la noche. Por esta razón, muchos son los papás que se rehúsan a acompañarnos a la fiesta pues saben que uno se instala y ellos se perderán el partido de fútbol/beisbol de esa tarde, a menos que el papá del cumpleañero sea muy fanático y se empeñe en poner aunque sea en un rinconcito el TV. Hoy en día dada la inseguridad que impera en el país nos hemos visto obligados a terminar la fiesta como a las 7 pm, hora en la que todo el mundo sale corriendo, pero esta realidad lo único que ha hecho es adelantar la fiesta, pero nuuunca hacerla más corta.
- Invitas a una hora calculando que la mayoría de los invitados van a estar dos horas después. A las piñatas venezolanas los invitados en promedio llegan dos horas después de la hora de la invitación. Osea es algo inexplicable, pero cierto. Si la invitación dice: Hora: 2 pm, llegas a las 4, si dice: Hora: 3 pm, llegaste a las 5... Es así! no hay forma de corregirlo. Aunque claro siempre hay un invitado puntual que cuando llega a las 2 pm te consigue corriendo arreglando todo, el cumpleañero o cumpleañera probablemente haciendo la siesta obligada para que "No se ponga malcriado(a) a la hora de la fiesta", los hermanitos aún sin vestir y tu esposo llegando con el hielo porque no compró suficiente a la primera... Y tu piensas: "Pero bueno y qué les pasó a estos que llegaron tan tempraaaanoooo??". Esto es algo que está instaurado en la naturaleza de nuestras fiestas, tanto que todas las atracciones, payasos, magos, títeres, shows, etc, los contratas en función de esta inpuntualidad compartida. Osea, JAMÁS pones al mago a las 2:30 pm, sería perder el dinero... A esa hora tienes las mesas de manualidades y las pintacaritas, que serán las anfitrionas de toda la tarde.
- No pueden faltar los tequeños. No importa cuál sea el menú de la fiesta, (que suele ser muy variado y representa uno de los puntos que se relacionan con la originalidad del evento), en toda piñata venezolana SIEMPRE debe haber tequeños. Es que la fiesta no está completa si no han pasado un tequeñito. Y ves a la gente preguntándose: "Ya te pasaron los tequeños?" "Espérate, no te embasures que por ahí vienen los tequeños"... jajaja Bueno, la verdad es que el famoso tequeño es como el ícono de cualquier fiesta que se respete en nuestro país.
- Siempre hay algo "picante" de tomar. Ésta es la forma de contrarrestar la resistencia de la que hablaba en el punto 1 y realmente logra mejorar la afluencia de papás a la fiesta. "Ay mi amor vente conmigo así comes y te tomas alguito ahí con los otros papás"... Y también es bien recibido entre las mamás que no vemos el momento de sentarnos en la mesa a tomarnos un "tintico de verano" o un "mojito" con las otras mamás o las amigas que tienes años sin ver.
- La mesa de postres es clave. A los venezolanos nos encantan los postres y cómo disfrutamos de la mesa de dulcitos de las piñatas! Es que les caemos encima!!! Eso es verlos y devorarnos las polvorosas, los brownies, alfajorcitos, pies, shots de lo que pongan, papitas de leche (por qué será que siempre hay papitas de leche?), suspiros y pare de contar! Y luego al momento de cantar cumpleaños salen aquellos postres de las abuelas que esperamos también con ansias!! La torta de chocolate de la Gata, la Isla Flotante, el Merengón de fresas o de mango, el quesillo, la gelatina de cuadritos, el tres leches, algún mousse de parchita o de chocolate... mmm.. Hay para todos los gustos!!
- Y por último, lo más, más venezolano de todo: LA PIÑATA! El momento de tumbar la piñata ha llegado! y salen ese poco de muchachitos con sus mamás, papás (o con quien hayan ido) a sentarse en círculo alrededor de aquella figura...
Creo que la mayoría de las mamás hemos entendido que NO podemos poner de piñata al superhéroe, a la princesa o al personaje favorito de nuestros hijos que es tan protagonista como el cumpleañero de ese día. Imagínense después de que esa piñata ha pasado como una semana en la casa, seguramente el cumpleañero ha jugado con ella, ha dormido en su cuarto... En fín, se han hecho como mejores amigos y el día tan esperado de la fiesta vienen nada más y nada menos que ha destrozársela, cayéndole a palazos! En verdad es algo tan ilógico!! Entonces ves a aquel cumpleañero con un ataque (totalmente justificado) porque no quiere que tumben la piñata! y los papás peleando con el pobre que además ya está cansado y quiere irse a dormir con su muñeco!! Menos mal que ya vemos más piñatas del malo de la película, del zapato de Cenicienta, la manzana de Blanca Nieves o la araña...
Pues ahí los ves sentados... y arranca el "daaale, daaale, dale a la piñaaataaa"... A manera de llevar algún orden y que todos le den, empiezan los más pequeños, el que se atreve, el que lleva la mamá cargado, y los grandes gritando "A miiii, a miii!"... Y comienza la gente a gritar enardecida!! Daaaaleeee! Puuuullalaaaa! Y los papás también a la anfitriona: "Mi amoooor, dáselo a él, el de la franelita de rayiiitas que no le ha dadoooo!" Sí, el de la franelita de rayitas, el cuarto bate que la va a destrozar y que la payasita está dejando de último... Total que la tumban (dejando seguro a alguno sin haberle podido pegar) para darle paso a los juguetes y caramelos que caen del cielo sobre esas cabecitas... Y mi hijo llorando porque siempre algo duro le saca un chichón!!! y empieza otra vez la gritería, las niñas con los vestidos y las faldas abiertas de par en par para recoger lo más que puedan! Otra vez los papás encima agarrando lo que consigan y peleándose con un niñito por una pulserita de plástico! Y finalmente, el llanto de quienes no agarraron nada...
Sí ... es un cuadro a veces dantesco...
YOU ARE INVITED TO A PARTY...
Llegó la tarjeta de invitación del amiguito del colegio de mi hijo y dice: "Hour: 11:00 am - 1:00 pm"... De 11 a 1? "Osea podemos llegar de 11 a 1?" Noooo! la fiesta es de 11 am a 1 pm!!! Este es, sin duda, el primer shock cultural! Cómo alguien puede hacer una fiesta por dos horas!?
Bueno reconozco que a veces no lo logramos! A pesar de poner despertador (porque para llegar a las 11 necesitas despertador!), de dejar ropas y pañalera listas desde la noche anterior, de irte sin desayunar... A la última llegamos a las 12:30 a cantar cumpleaños y comer torta... Qué frustración!!!
No hay punto de comparación... Una piñata americana es una especie de película que guarda un perfecto orden (Si tal cual, una película de dos horas de duración!). Llegas y puedes jugar por un máximo de una hora, pero una hora de juegos orquestados: Ahora los trampolines, listo! Ahora la tirolina, listo! Ahora el mago.. y se acabó! En la última hora: pasen al saloncito que TIENEN que comerse la pizza servida en platicos, listo! Si son muy atrevidos, habrá una pequeña piñata pero olvídense del salvajismo al que estamos acostumbrados! Aquí o son de cinta que halan todos al unísono o bueeeeno... le dan un pequeño palazo y listo, todos a apartarse que van a lanzar los caramelos cuidadosamente para que nadie salga herido y no haya demandas!
Última media hora: De vuelta al saloncito a cantar cumpleaños, repartir la torta, darte tu recuerdito y chao! Te sacan del saloncito ya con las anfitrionas bolsa negra en mano, recogiendo todo. ADIÓS!
Es así de rápido, es así de fácil! Es así de antipiñata...
Recuerdo la pasada fiesta que estaba con una pareja de venezolanos, él se quejaba de tener que haber ido a esa fiesta y la esposa le decía: "No te quejes que en Caracas hubieras tenido que estar 5 horas!" y él respondió: "Sí pero en Caracas estaría sentado con whisky en mano y comiéndome un tequeñito, no aquí parados con frutas y agua!" jajajaja No les dije yo?
Pero en resumen, en esta búsqueda incesante de apreciar lo bueno del país que te recibe creo que lo mejor es disfrutar de las ventajas que te da la practicidad con que se vive aquí: menos gastos, menos corredera, menos decoración, menos stress y sobretodo cero recogedera de papelillos en la grama cuando ya estás agotada... Y los niños? Ellos al final también la gozan y la agradecen! eso sí... poquito porque es bendito!...
Seguimos viéndonos en la vía...
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